Él o yo.
- María Eugenia
- 3 mar 2018
- 2 Min. de lectura
"Él no queria que yo cantara. A mi me encantaba hacerlo. Él decía que las artes eran una perdida de tiempo. Yo estudiaba artes. Él estudiaba derecho. Yo odiaba las leyes. Él quería quedarse en su país y montar un despacho. Yo queria viajar alrededor del mundo. Él me obligaba a conseguir un empleo. Yo quería seguir danzando por las calles. Él preferia los días lluviosos y grises. Yo amaba el sol y los colores. Él era agua. Yo era aceite. Él me conoció en el peor momento de mi vida. Yo lo conocí en el mejor momento de la suya. Él no me presentó ante su familia, por verguenza. Yo lo presenté como mi primer amor. Él decía que no me haría feliz. Yo pensaba que sí podría. Él no admitió que se sentía atraído. Yo admití que me enamoré de él. Él me gritaba siempre pero empezó a enamorarse. Yo me cuestionaba a mi misma y me sentía inútil pero empecé a valorarme. Él decidió quedarse conmigo. Yo preferí alejarme. Él no entendió por qué. Yo sabía la razón. Él juzgaba y atormentaba, estaba lleno de prejuicios, odiaba la vida. Yo comprendía y admiraba, amaba vivir. Él era mi amor desde que lo conocí. Yo empecé a ser el suyo después de que entendiera que yo valía mucho. Él ahora daría lo que fuera por volverme a ver. Yo ruego porque no suceda otra vez. Él fue mío, según yo. Yo fuí suya, según nadie. Él era, mi amor, un amor que me restaba. Yo era, su amor, un amor que le sumaba. La balanza no estaba equilibrada. Yo rompí todo el amor que sentía por él y él se enamoró, muy tarde, de cada hérida que abrió en mí."
M&E
